Mis datos

¿Cómo soy?

Mi historia

Adra es una perrita de carácter sensible aunque no excesivamente, al menos comparándola con otros perretes que hay en el albergue. Le gusta el contacto cuando ya te conoce pues al principio no es una perra que regale caricias. Tienda a agobiarse en la manipulación, colocación de arnés etc si no tiene cierta confianza contigo. Pasea bien por zona de parque, pero se asusta ante ciertos estímulos en movimiento (bicis, corredores, niños...) lo que provoca que se pare en seco. Solía salir a la calle con su compañero de chenil Elfo, con quien tenía mucho vínculo y quien le ayudaba a mostrarse más confiada. De hecho le buscaba y le seguía, por lo que seguramente le venga bien vivir junto a otro peludo equilibrado. No es apta para vivir en zonas demasiado urbanas ya que no creemos que llegase a adaptarse bien. Su nivel de actividad es muy alta. Las primeras presentaciones con otros perros puede regañar a los que son demasiado intensos, pero se le pasa relativamente pronto y enseguida se pone a jugar (es un poco acachorrada a veces). Tiene instinto de caza y por la calle intenta perseguir pajarillos por lo que su futura familia tiene que tener especial cuidado en salidas, excursiones etc.