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Mi historia

Senua fue recogida de la calle ya que, ella y sus hermanos Luiggi y Mario tenían los ojitos muy mal y necesitaban tratamiento. Tras varios días de vigilancia, la madre no aparecía y no podíamos esperar más. Desde mayo se encuentran en nuestro centro y están creciendo en una pequeña gatera donde comparten piso con Mim, otro cachorro que, como ellos, está creciendo entre 2 metros cuadrados. Estos peques buscan la atención constantemente, quieren jugar y que les dediques un ratito ya que lo necesitan muchísimo. Por favor, no dejemos que estos peques pasen su primer año sin conocer el calor de un hogar. Escríbenos y te contamos sin compromiso como es el trámite de la adopción, ¡no te arrepentiras!