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EN ADOPCIÓN SOLO EN LA COMUNIDAD DE MADRID REQUISITO IMPRESCINDIBLE: PROTECCIONES EN VENTANAS, BALCONES Y TERRAZAS. La historia de Mysho es bastante triste. Era un gato de colonia, y su vida se vio truncada cuando tenía tan solo 4 meses de edad porque un perro lo enganchó y le destrozó la columna. Fue llevado a una clínica veterinaria para eutanasiarlo, pero la veterinaria vio que había posibilidades de recuperación y se negó a dormirlo. Las personas que lo llevaron no se hacían cargo, así que contacto con nosotras y rápidamente lo llevamos a un neurólogo para ver qué posibilidades tenía aquel bebé. El gato se arrastraba, no podía caminar. El neurólogo no vio posibilidad de operación por el lugar donde estaba la lesión, pero nos aconsejó hacer rehabilitación con él. Y así lo hicimos. A día de hoy, Mysho camina, corre y trepa. Hace vida de un gato normal, salvo por una secuela que le ha quedado, no puede orinar y defecar por sí mismo, por lo que hay que hacerlo mediante vaciado manual (cualquier veterinario puede enseñarte a hacerlo). Sabemos que esta condición se lo pone difícil para ser adoptado, pero los milagros ocurren, ya lo hemos vivido y visto en otras ocasiones, así que por qué no vamos a encontrar una familia maravillosa que quiera dar un hogar a nuestro chiquitín. Con la gente es muy mimoso y con perros y gatos, aunque al principio le cuesta un poco, termina conviviendo con ellos. Se realizará contrato de adopción y seguimiento. Se entregará con chip, desparasito, vacunado y esterilizado. Si estás interesadx en adoptar a Mysho, puedes ponerte en contacto con nosotros a través del correo electrónico [email protected]