Mis datos

¿Cómo soy?

Mi historia

Cuando mi ángel de Adayra Adopciones me encontró vagando por la carretera y se acercó a mí para intentar cogerme y ponerme a salvo, no era consciente de lo que estaba pasando. No sabía que había sido abandonado, porque además mi aspecto era el de un perro bien cuidado. El susto se me pasó enseguida cuando empecé a ver a todos esos amigos perrunos, con los que estoy compartiendo muchos juegos y disfrutando como un enano. Y es que me encantan los perros y, por supuesto, muero por una caricia de un ser humano. De ahí que digan que soy muy cariñoso, divertido y juguetón, a la vez que obediente. Un perro 10 que desearás que forme parte de tu familia.